El término SEO, acrónimo de "Search Engine Optimization", se refiere al conjunto de técnicas y prácticas dirigidas a optimizar una página web o un contenido para los motores de búsqueda. La pregunta que muchos se hacen hoy en día, en la era de la inteligencia artificial, es si la optimización para motores de búsqueda todavía tiene sentido. La respuesta es simple: mientras utilicemos motores de búsqueda como Chrome, Bing o Safari, la optimización sigue siendo esencial. No hay escapatoria.
Considero el SEO no solo una técnica, sino una forma de pensar sobre la web radicalmente diferente de la comunicación tradicional en papel impreso. Un artículo para la web no es como un artículo de periódico, un capítulo de un libro o un documental de televisión. Está creado para un entorno con reglas, estructuras y dinámicas propias. Optimizar para motores de búsqueda significa precisamente eso: construir contenidos pensados específicamente para la web.
Es cierto, la inteligencia artificial nos ofrece hoy la posibilidad de obtener resultados directamente de sus respuestas. Sin embargo, también es cierto que motores de búsqueda como Google integrarán rápidamente (o ya lo han hecho) resultados de IA en sus respuestas. Pero es fundamental recordar que este conocimiento proporcionado por la IA se basa en la lectura y el análisis de los contenidos que nosotros publicamos en línea.
Los "spiders" o "bots", las herramientas con las que los motores de búsqueda (y ahora también las IA) exploran la web, siempre necesitarán datos frescos, bien escritos y organizados. Esta organización, que una vez se llamó "datos estructurados", sigue siendo crucial para garantizar que las páginas sean claras y utilizables tanto para los motores de búsqueda como para los usuarios.
Por eso sigue siendo tan importante pensar en términos de SEO. A menudo, el SEO se ha interpretado erróneamente como una carrera por escalar las clasificaciones de los motores de búsqueda (SERP). En realidad, esta competencia por la posición siempre ha premiado los contenidos bien organizados y de calidad.
Hoy en día, deberíamos considerar el SEO como una forma de interactuar con la web respetando las mejores prácticas de escritura. Pensamos en las recomendaciones de los directores de redacción, que exigen un estilo claro, una longitud adecuada y títulos atractivos. Incluso en el mundo del SEO, los "titulistas" profesionales juegan un papel fundamental: la creación de títulos efectivos es el primer paso para captar la atención de los motores de búsqueda.
Debemos comprometernos a crear títulos que sean relevantes para el contenido, interesantes y significativos. Un título inexacto o poco atractivo resultará en una evaluación negativa por parte de los motores de búsqueda. Por lo tanto, el SEO es mucho más que una simple técnica: es un enfoque holístico para la creación de contenidos.
A menudo he encontrado clientes que me contaban haber encontrado a un consultor SEO que "hace todo sin mirar mis contenidos". Es cierto, existen técnicas basadas en backlinks y la publicación del sitio en Search Console es importante. Pero al final, el enfoque debe estar en los contenidos mismos. El SEO significa principalmente cuidar de los propios contenidos y publicarlos de manera que estén optimizados para los motores de búsqueda.
Finalmente, quiero subrayar un aspecto crucial: es cierto que la inteligencia artificial puede ofrecernos resultados ya legibles, sin citar o enlazar las fuentes. Pero creo que estamos viviendo un período de experimentación y cambio radical.
Los modelos de negocio de los motores de inteligencia artificial y de los motores de búsqueda tendrán que encontrar una manera de financiar sus enormes data centers sin reconocer el valor de las fuentes. Si los autores no pueden seguir publicando contenidos de calidad, la inteligencia artificial resultará menos actualizada e informada.
La publicidad, que financia gran parte del sistema actual, está estrechamente relacionada con la afluencia a los sitios web y portales. Si este modelo de consumo de la web cambia, la publicidad también se verá afectada. Por ejemplo, la AI Overview ya muestra la publicidad en posiciones más bajas. Esto es solo un anticipo de lo que nos espera en los próximos meses, quizás incluso en las próximas semanas.
Considero que seguiremos viendo cambios significativos en el futuro inmediato, y por eso es fundamental seguir invirtiendo en la web, en un correcto posicionamiento en los motores de búsqueda y en la creación de contenidos interesantes. Será cada vez menos interesante publicar definiciones que podemos obtener fácilmente pidiendo a la inteligencia artificial; serán mucho más interesantes las interpretaciones, perspectivas únicas y conexiones inesperadas.
No se trata de inundar la web con noticias falsas, sino de ofrecer visiones alternativas y conexiones que no son inmediatamente evidentes. Por último, es determinante cuidar de nuestra marca. Si tienes un sitio como brunoitaliano.com donde publicas contenidos de valor, tu público no buscará necesariamente en Chrome el título de un artículo específico. Más probablemente, visitará regularmente tu sitio.
Me centraré en promocionar mis contenidos en redes sociales, en abrir un boletín y en construir mi marca a través de la fidelización del público. El mundo está en constante evolución y está convergiendo rápidamente hacia una mayor calidad. Por ello, sigamos haciendo SEO en el sentido más amplio del término: aprender a escribir contenidos excelentes para la web. Esto seguirá siendo y será siempre importante.
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